miércoles, mayo 04, 2005

Golpe de suerte..

No pido de aquellos que llegan por la nunca bien ponderada fortuna... aún cuando suene hasta contradictorio... no. Pido un golpe de suerte de esos que remecen, que hacen reaccionar y hasta te dan un empujoncito que nunca está de más.

Pasan los días y hasta había perdido la costumbre de escribir aquí, en mi blog. En un momento sentí que escribía palabras al viento que nadie leía y que lógicamente no tenían un buen receptor. Por ende, mi desánimo a gastar la yema de mis dedos sobre el teclado y empleé mi abundante tiempo disponible en otros menesteres. Por ejemplo, he leído la Biblia, he compartido gratos momentos con mi hermanito viendo películas y hasta un nuevo carrete, de esos "freaks", tuve el fin de semana... y yo que había pensado en obviarlos o simplemente dejar de participar en ellos.

La vida sabe cómo taparte la boca.

Debo reconocer que mucho no he puesto de mi parte para levantar tan decaído ánimo. Tal vez porque cada cosa nueva que intento emprender posee su pero, y no digamos que un pero menor, para nada, sino todo lo contrario. En lo que respecta a trabajo, aún mi padre está con su ya conocido titubeo, su poco compromiso y hasta me dice que intente por otra parte... supuestamente él me daría un puesto en la empresa en la cual se desempeña como supervisor. Ojo que no estoy pidiendo nada regalado... noooo.. para nada, sólo que en Chile, como en la mayor parte del mundo, se necesitan "contactos", "pitutos". Bueno, erradamente pensé que mi propio padre sería uno efectivo.

Hoy estoy otra vez con desvelo. En una de esas, las ganas por escribir se dan sólo en estos momentos quizás con la intención de cansar mi mala visión y así forzar un sueño no deseado. No lo sé.. si se dan cuenta por las horas de mis posts, la mayor parte de ellos es subido en estas horas...

Hace un rato teníamos planeado con mi hermano ver algunas películas (¿¿¡¡qué raro¡¡???). Llegó Wild, Piris (alguien de quien no he hablado mucho) y llegó también Angelito. Antes de su llegada estaba con un ánimo de los mil demonios y lo peor es que no tengo idea claramente por qué... o sí lo sé y no lo quiero reconocer... En fin. Incluso, se había mantenido constante hasta minutos antes de la llegada de Angelito. Ella, solamente con su presencia, fue capaz de hacerme olvidar de mi mal humor y cambiarlo por una buena vibra. Es lamentable el tener que depender de lo que irradian otras personas para modificar un ánimo deplorable. Intento ser independiente y éste es uno de aquellos momentos donde me doy cuenta que de independiente sólo tengo la intención. Como lo he repetido en alguna oportunidad, con su forma de ser, de hablar, de actuar... por su esencia Angelito me encanta. Quiero evitarlo, lo prometo, si hasta más de una tontera he hecho y no estimo conveniente que comience a ventilar más detalles, sólo puedo decir que para nada fue la solución.

Mi dependencia no tiene por qué significar más allá que una atracción. Creo. O me quiero convencer. Sólo sé que trato de no demostrarlo cuando la miro de reojo, cuando a su primer esbozo de decir algo ya la estoy mirando atentamente y digamos que ¡¡poco no habla!!... jejeje. Trato de hablarle como al resto sin una mínima insinuación de algo más. A veces resulta y otras no. Su forma de ser tan "pajarito" me ayuda a encubrir un poco aquello. Pero desde ahora probaré otra forma, una más lejana, más distante incluso, más distante que con el resto y sólo con la intención de borrar toda posible dependencia de ella. Al menos yo me entiendo. Creo. Pero para eso necesitaré más que la intención, más que todas estas palabras que lanzo al extenso e infinito mundo virtual, sé que también necesitaré para esta empresa un gran Golpe de Suerte, un empujoncito.